Si es que no aprendo, parece mentira, con todo lo que tengo en casa, en el ordenata, hasta en el coche pendiente de escuchar... y voy yo, el mas listo, y solo se me ocurre pinchar este "Living Proof" que grabó el gran, ¡no! el grandioso Buddy Guy en 2010 con 74 añitos de nada, quien lo diría escuchando el cubículo de acero inox relleno de dinamita presta a explotar en cualquier momento que es este disco.
Y es que no es la primera vez que introduzco este CD en el equipo y la voluntad se me anula, los dedos se me encojen, no siendo capaces de pulsar al eject que me devuelva la libertad y los oídos pierden la capacidad de poner su atención auditiva en otro sitio, y se sienten prisioneros de la guitarra de este jovencísimo hombre de 74 años capaz de hacer sentir terror a la cordura de aquel desgraciado que ponga su cerebro al alcance del adictivo sonido de su stratocaster.
Resumiendo, que sabiendo como se, que este disco es un pasaje a la mas dulce exclavitud auditiva, a la condena a remar en las galeras bluseras de mi alma, al insomnio para mi cerebro que no puede dejar de repetir las melodías, los coros, los vientos y los enfermizos sonidos de las seis cuerdas de Mr. Guy, y su sonido recién llegado del infierno del alma de blues de este genio de los trastes, del sindrome de abstinencia, abstinencia por la voz de Buddy, oscura como la noche en que Robert Johnson rubricó su pacto con el señor de las tinieblas en aquel sagrado cruce de caminos.
Sabiendo que me condeno a correr tras el maestro, secando el suelo del rastro de sudor que, a borbotones, cae de la piel de cuero de este inmortal del sentimiento bluesy, música que suda, con frío o con calor, que suda bourbon y ron a partes iguales, y un dulce néctar desconocido para aquellos que no están envenenados del poder de convicción del sonido que envuelve el aire allí donde suena el arma de eyaculacion masiva que es la guitarra de este rey del blues, pero néctar que nos impide la vida a los que lo hemos probado alguna vez, y ahora, pobres adictos pateamos la tierra rocosa del paraíso de los sueños de los bluesmen, en busca de alguna fuente que lo mane y nos permita acabar con nuestro dolor, dolor de ausencia de música tan gloriosa como la que suena en este "Living Proof", una de las últimas fuentes de néctar que nos pueden calmar esta sed, si sabemos buscarla.
Esta noche estoy dándome un autentico atracón de ese néctar, mientras las incandescentes alfileres que son los aullidos de esa guitarra de otro mundo se clavan en mi cerebro incitándolo a volver a escuchar el penúltimo sueño oscuro y luminoso al tiempo de Buddy Guy, obligándome a vencer al sueño y seguir enganchado a "Living Proof", un disco que me convierte en esclavo, en feliz esclavo, y que hace que durante unas horas, o días, me olvide de cualquier otra cosa que pase en el mundo, un disco que me anula, un genio que me atrapa... que otra vez me tiene atrapado entre sus garras... te necesito Buddy.
Si tenéis en estima vuestra cordura, huir y no pinchéis estos temas. si queréis experimentar el feliz paso al infierno cálido y confortable del blues... no lo dudéis, subiros a la madriguera de los adictos al blues...
Y es que no es la primera vez que introduzco este CD en el equipo y la voluntad se me anula, los dedos se me encojen, no siendo capaces de pulsar al eject que me devuelva la libertad y los oídos pierden la capacidad de poner su atención auditiva en otro sitio, y se sienten prisioneros de la guitarra de este jovencísimo hombre de 74 años capaz de hacer sentir terror a la cordura de aquel desgraciado que ponga su cerebro al alcance del adictivo sonido de su stratocaster.
Resumiendo, que sabiendo como se, que este disco es un pasaje a la mas dulce exclavitud auditiva, a la condena a remar en las galeras bluseras de mi alma, al insomnio para mi cerebro que no puede dejar de repetir las melodías, los coros, los vientos y los enfermizos sonidos de las seis cuerdas de Mr. Guy, y su sonido recién llegado del infierno del alma de blues de este genio de los trastes, del sindrome de abstinencia, abstinencia por la voz de Buddy, oscura como la noche en que Robert Johnson rubricó su pacto con el señor de las tinieblas en aquel sagrado cruce de caminos.
Sabiendo que me condeno a correr tras el maestro, secando el suelo del rastro de sudor que, a borbotones, cae de la piel de cuero de este inmortal del sentimiento bluesy, música que suda, con frío o con calor, que suda bourbon y ron a partes iguales, y un dulce néctar desconocido para aquellos que no están envenenados del poder de convicción del sonido que envuelve el aire allí donde suena el arma de eyaculacion masiva que es la guitarra de este rey del blues, pero néctar que nos impide la vida a los que lo hemos probado alguna vez, y ahora, pobres adictos pateamos la tierra rocosa del paraíso de los sueños de los bluesmen, en busca de alguna fuente que lo mane y nos permita acabar con nuestro dolor, dolor de ausencia de música tan gloriosa como la que suena en este "Living Proof", una de las últimas fuentes de néctar que nos pueden calmar esta sed, si sabemos buscarla.
Esta noche estoy dándome un autentico atracón de ese néctar, mientras las incandescentes alfileres que son los aullidos de esa guitarra de otro mundo se clavan en mi cerebro incitándolo a volver a escuchar el penúltimo sueño oscuro y luminoso al tiempo de Buddy Guy, obligándome a vencer al sueño y seguir enganchado a "Living Proof", un disco que me convierte en esclavo, en feliz esclavo, y que hace que durante unas horas, o días, me olvide de cualquier otra cosa que pase en el mundo, un disco que me anula, un genio que me atrapa... que otra vez me tiene atrapado entre sus garras... te necesito Buddy.
Si tenéis en estima vuestra cordura, huir y no pinchéis estos temas. si queréis experimentar el feliz paso al infierno cálido y confortable del blues... no lo dudéis, subiros a la madriguera de los adictos al blues...
No me extraña que estés tan pillao por este discazo del gran Buddy, a mi me paso lo mismo. Cosa esta, que no me volvía a pasar con sus anteriores discos entre el Sweet Tea del 2001 y este. Incombustible músico, este muchachito de 75 años. Ya no hay artistas de esta pasta....
ResponderEliminarGran post Addi.
Un abrazo.
Oh my God...eso es justo lo que necesitaba oir ésta mañana.
ResponderEliminar"It is a living proof that the force of life is spreading through his senses" y de paso los tuyos.Genial entrada Addison!
Un abrazote.
Como lo pones, será cuestión de volverse un poco loco. Todavía no escuché este álbum y otros tantos que, igual que tú, tengo pendientes en la recámara. Hay que tomarlo con calma y disfrutarlo.
ResponderEliminarSaludos.
Vamos, este disco es una pasada. Es increíble que este coloso sea capaz todavía a estas alturas de sacar un material tan bueno.
ResponderEliminarEl tío se merienda el solito el 95% de músicos actuales, así de claro.
Saludos.
Es que cuando Mr.Guy te agarra lo hace con fuerza. Este disco fue una sorpresa para mí brutal, solo tenía dos clasicos como "A man and the blues" y "Stone crazy", y escuchar esto me devolvió la pasión por el eterno gran bluesman. Un abrazo, hermano, el blues nos salvará.
ResponderEliminarJoder, tío. Con tu reflexión final, me has hecho dudar. Pero, al final, le he echado un par y me los he pihcado todos.
ResponderEliminarDebe ser que me tienta eso de experimentar con el infierno.
Un abrazo!
Contento y con sangre nueva saldré hoy de tu casa, por el texto, tan sentido, y por este disco que no conocía y que me está encantando. Inmenso Guy: guitarra y voz, a partes iguales.
ResponderEliminarUn abrazo.
TwoHeadsOneBrain: Este disco me voló a cabeza la primera vez que lo escuché y me la sigue volando la tropecientosmil que lo he escuchado, es una POM de cuidado, y Buddy... yo he tenido la suerte de verle en directo y es un artista heróico, te enamora para siempre, un genio.
ResponderEliminarGracias amigo, un abrazo.
Flordeloto: Pues me alegro que la entrada haya tenido un efecto tan positivo y que te haya gustado.
Besos.
Aurelio: Yo que tu, correría el riesgo... Aurelio, en serio, corre el riesgo...
Un abrazo!
Rockland: Mi millonario amigo, tienes razón, el disco es impresionante, genial y Buddy un artista que es gloria viva del Blues, del rock y de lo que le eches.
Un saludo.
Johnny: Yo creo que este tiene algo con el otro... como Robert Johnson, porque sino no lo entiendo.
El blues nos salvará, con el rock y el country y nosotros mismos.
Abrazos brother...
Evánder: Si ya me imagino yo que aquí la mayoría no se habrá podido resistir, como todos vamos del mismo palo...
Pincha sin miedo, que si acabamos en el infierno seremos muchos y lo pasaremos bien jaja.
Espero que te hayan gustado los temas.
Un abrazo!
Angel: Pues genial si te he descubierto un discarro como este y encima te esta gustando, me alegro de verdad.
Artistazo el chaval Buddy.
Un abrazo!
Te acabo de hacer promo de la entrada vía Twitter. Es bueno que la peña conozca tu blog y este disco, claro.
ResponderEliminarSalus.
Pensaba que ya te tenía enlazado en mi blog pero veo que no. No tengo perdón de Dios. Menos mal que un ángel de la guarda me lo recuerda de vez en cuando.
ResponderEliminarPor cierto, el disco es un 10 como una casa de grande. Uno de los mejores de 2010 aunque no lo pude poner en mi lista porque aún no lo había escuchado. Le dediqué una entrada ya en pleno 2011 entusiasmada con lo que había escuchado. Qué grande es este tío.
Salud.
Freaky: Joder Freaky, si llego a saber que te asustabas no decía nada ja,ja,ja..
ResponderEliminarLo que pasa es que tu me lees con buenos ojos y con cariño, cosa que te agradezco infinito. Aqui normalmente lo mejor suelen ser los comentarios de mis colegas.
Muchas gracias tío.
Si localizas el punto exacto del Crossroad me lo pasas...
Es un disco a-c-o-j-o-n-a-n-t-e.
Un fuerte abrazo.
Angel: Coño Angel, muchas gracias, no estoy en Twitter pero me he registrado para verlo y algo he hecho por ahi, no lo controlo, pero practicare.
Lo mejor de todo, lo que mas me alegra, es que te haya molado el post, y hayas conocido gracias a el este discazo.
Muchas gracias y un abrazo!
Paulamule: Hola Paula, me alegra un montón verte por aquí, lo leí en su día, entoncés yo aun no me animaba demasiado a comentar. Recuerdo que te encantó, y como para no es un discazo genial.
No te preocupes por el enlace, no me había dado cuenta la verdad.
Espero verte algún dia mas por aquí, siempre que te apetezca claro, yo paso por tu casa y la de Rockland todos los días, bueno, últimamente todas las noches...
Saludos.
Y a por la copa!!!!
Ohhhh, qué bueno! Me lo pido!
ResponderEliminarAgente: Bueno pero luego no digas que no te he advertido ja,ja.
ResponderEliminarTe va a encantar...
Saludos!
Solo he escuchado un par de temas (aunque cae entero seguro) y sólo con "74 Years Young" estoy dispuesto a pagar el precio.
ResponderEliminarGran post y nos vemos en el infierno bluesero.
Un abrazo,
Arthur
Arthur: Bueno, pero luego no digas que no te advertí, no vayas ha echarme a mi las culpas de tu perdición...
ResponderEliminarEscúchalo entero chico, es un discarro totalmente sublime.
Abrazos.