El viernes era el día marcado como "peor" de los tres del festival, en primer lugar me quedaba solo toda la mañana, pues mi compañero de siempre, mi hermano Arthur tenía que ausentarse por unas horas de Gazteiz porque no le quedaba otra que trabajar y me las tenía que arreglar solo por Vitoria por unas cuantas horas, por otro lado, el elenco del día no contenía precisamente lo mas apetecible para mi de todo el cartel y además estaba el tema de Ozzy, que aun no se me había pasado el malestar por como se había resuelto la historia tras la suspensión de Black Sabatt.
Pero como todo tiene solución y con buen talante todo se puede sobrellevar, me puse en plan positivo y me levante con mi hermano, desayunamos y encaré Vitoria como si no la conociera. Volví a desayunar, me estafaron, en parte por mi culpa, mi puta manía de pedir tortilla de patata en los bares cuando tengo mas que demostrado que en la inmensa mayoría de estos la tortilla es infumable, así que culpa mía.
El día era buenísimo y me dedique a pasear, luciendo camiseta de The Who, gafas de sol modelo Graham Parker y botas, vamos todo un freakyrockero pasando un fin de semana festivalero, con un par...
Unas cervecitas en la Virgen Blanca con unos chicos de Fuengirola que conocí muy majos y concierto soul con un tal Charles Bradley & His Extraordinaires.
Y con este Charles Bradley empezaba el día en cuanto a lo musical, los bolos de la Virgen Blanca me encantan, es una especie de extensión del festival a la ciudad que hace de anfitriona del mismo y que allí, antes de comer, nos sirve como aperitivo un canapé musical para hacer boca a la gran comilona que vendrá por la tarde, además de brindarte la ocasión de encontrarte con conocidos y amigos con los que comentar como va el festival, un buen rollo total el que se respira en las mañanas festivaleras en esta bonita plaza. Pero si además lo que pasa en el escenario merece la pena, pues entonces miel sobre hojuelas, y así fue el viernes con la actuación de Charles Bradley, personaje excesivo en gestos y ademanes sobre el escenario, con una voz clásica, de ecos puramente souleros y acentos melancólicos, acentuados por una historia personal de lucha y sinsabores siempre en busca de un sueño que hoy a sus, digamos, unos cuantos años, empieza a hacerse realidad.
El señor Bradley derrochaba, además de voz, humanidad, ternura e ilusión, sinceridad en sus agradecimientos y en el lastimero sonido de su voz, excesiva como el, pero extraordinaria, secundado por una banda formada por unos jóvenes y blancos músicos que sonaron perfectos, conjuntados y perféctamente compenetrados con el divo, que nos ofreció un recital que fue de menos a mas y termino metiéndose a los allí congregados en el bolsillo, gracias a su voz, su sincera y emocionante forma de cantar, sus ganas arrasadoras de agradar y la belleza de varios de los temas que interpreto, destacando una magnífica versión del "Heart of Gold" del gran Neil Young, que convirtió en un soul de preciosos ecos campestres. Fantástico este entrañable Charles Bradley and his Extraordinaires.
Llegó mi hermano, comimos, descansamos un rato y de vuelta a Mendizabala, tras cambiar euros por tickets, el día antes nos bebimos todos los que sacamos, decidimos empezar por Pontius Snibb 3, como no, en el escenario 3 -"Robin Gibb".
El sueco Pontius Snibb con su actual proyecto, este power-trio, llegaba a Vitoria con evidentes ganas de agradar y de demostrar de lo que es capaz, es decir, ofrecer un recital pleno de fuerza, hard rock compacto y sin fisuras que recuerda a ZZ-Top o a AC/DC, que huye de virtuosismos innecesarios y se centra en la coherencia sónica de unos temas disfrutables y bien escritos, si a esto unimos una actitud sobre el escenario de encendida actividad y un gran acompañamiento en la base rítmica terminamos recibiendo del escenario un gran concierto como así resulto este de los nórdicos Pontius Snibb 3, un concierto que se cerro con el lider, el propio Pontius, mezclándose con el personal que allí nos congregamos, sonriendo a diestro y siniestro y sin dejar de tocar la guitarra, una Gibson SG que nos hacia recordar mas aún a Angus Young y sus AC/DC, disfrutamos de lo lindo con estos chicos, a pesar del sol.
Para hacer tiempo hasta el bolo de Rich Robinson, nos pasamos por el escenario 2 para hacer los honores a Gun, banda que pronto abandonamos, no nos gustaron y probamos suerte con The Amazing. Los suecos practican un folk-rock aburrido y lineal, con ciertos momentos tonales, pero que resulta demasiado místico e intenso, al menos para un servidor, que tras ese misticismo no ve absolutamente nada a lo que asirse, no me gustaron, lo siento, así que pudimos ir con tiempo a coger sitio para el siguiente bolo en el escenario dedicado a Levon Helm, que no era otro que el de "El Cuervo", Rich Robinson.
Rich Robinson es un músico talentoso, con una clase evidente y un dominio preciso de su instrumento, una bonita voz, y que además traía bajo el brazo un fantástico álbum aun calentito y que responde al título "Through a Crooked Sun" que presentaba en directo en esta piel de toro, en definitiva, que todo hacía prever un gran bolo. Pero no fue así, fue un buen bolo, pero no un gran bolo, decepcionó Rich Robinson, y decepciono por actitud, o sosería, no se, posiblemente porque no transmitió.
Nada achacable a su sonido, ni a su banda, ni a los temas elegidos, quizás sobró la versión del "Station Man" de Fleetwood Mac, a la que no hizo justicia al no adaptarse demasiado a la propuesta sonora que proponía el propio Rich, finalmente tras tres o cuatro temas en los que todo parecía demasiado lento, demasiado tranquilo, empezó a emanar algo de vida el escenario y la segunda parte del show mejoró.
Breve repaso por el mencionado álbum destacando la deliciosa "Standing in the Surface of the Sun". Poco ambiente frente al escenario hasta el último tema, nuevamente hacía su aparición el inconmensurable Neil Young, como por la mañana, en esta ocasión para cerrar el concierto del hermano pequeño de Christ (quien lo diría), sonando en la revisitación del cuervo de su clásica "Cinnamoon Girl", que despertó al respetable e hizo cantar ese vibrante estribillo y bailar al ritmo de su fibroso riff. Fin, Rich Robinson abandono el escenario sin ruido, igual que lo abordó, dejando vitola de ser un gran guitarrista, pero que bien haría en dejar sus bolos para salas donde poder convencer con su talento a las seis cuerdas y su cuidado sonido, en lugar de presentarse ante una concurrencia festivalera que necesita además de arte de un poco de electricidad vital, buen bolo, pero soso.
Encendido debate entre mi hermano y yo sobre el bolo, aunque realmente estábamos de acuerdo, y nos concentramos con The Screaming Tribesmen, quienes llevaban varios minutos sobre el escenario, los australianos haciendo lo que saben hacer, rock, de vitamínica actitud, muy buen sonido y tablas, estaban dando un muy buen concierto que se nos paso volando, y agradando al personal que se había dado cita en el escenario... ¿lo adivinais?... ¡Si señor!, en el tres. Los málditos solapes tienen eso, que te pierdes parte de conciertos que luego ves empezados y lamentas no haber visto enteros, dato a reflexionar por parte de los organizadores, una banda como la australiana merece ser vista de principio a fin, con la preparación debida y la disposición oportuna, lo merece porque es una muy buena banda y de hecho dio un fantástico concierto que por el tema del solape siento que no pude disfrutar como me hubiera gustado hacerlo.
Pasamos de Gallows, (nuevamente los solapes) y encaminamos nuestros pasos al escenario 1 donde estaba a punto de aparecer Ozzy, al final allí estábamos, esperando al "Madman", a pesar de todo, claudicando, a pesar del flojo bolo del año pasado, a pesar... Bueno que allí estábamos un año después.
Y que queréis que os diga, que Ozzy estuvo algo mejor que el año pasado, en cuanto forma física y mejor también de voz, que no bien, pues a partir del ecuador del concierto la poca que le quedaba empezó a descontrolarse y parecía que estaba (la voz) en otro concierto diferente al del cuerpo castigado del pobre Ozzy.
La primera parte fue una copia del bolo del año pasado, hasta el solo de batería fue el mismo, la segunda con algunos invitados y tal, resultó al final mas aburrida que la primera, por lo demás algún efecto de pirotecnia y poco mas. Señores, esto es lo que Ozzy puede ofrecer, nada mas, un show mas bien flojo, sustentado únicamente por un ramillete de buenos temas, manifiestamente insuficiente.
Después de esto, fuimos a rellenar el buche, paso de hablar de la comida del festival, tema trillado ya y que no parece tener solución, y nos acercamos a ver a Mars Volta. Tienen una cosa indiscutible la banda de Cedric Bixler-Zavala, y es que no dejan indiferente a nadie. Había expectación entre el público, no muy numeroso, que esperaba minutos antes la salida de los de El Paso, quienes se plantaron en el escenario con su parafernalia habitual, Cedric empezó con sus excesos escénicos y la música, esa suerte de rock progresivo tan personal que practican, empezó a flotar en el ambiente abriendo una criba entre seguidores y detractores, aguantamos un rato las acometidas escénicas de Cedric Bixler-Zavala y decidimos abandonar el festival, había sido un día duro, sobre todo para mi hermano, y al día siguiente venía lo que preveiamos mejor del festival. Saliendo me encontré con el caballero que nos deleita desde Red River, con el que fue, como siempre, un placer debatir las impresiones que nos llevábamos hasta la fecha del festival y como dicen los Siniestro... "Camino de la cama... es el mejor camino..."
Bueno, era previsible que el viernes iba a ser un poco flojo. A mi me hubiera apetecido ver a Charles Bradley en la Virgen Blanca. Esos bolos a medio día suelen ser especiales, sobre todo fue el de Mike Farris hace unos años.
ResponderEliminarEl resto sin sorpresas. A mi Mars Volta no me gustan nada de nada. No hubiera aguantado ni cinco minutos y Rich Robinson le vienen muy grandes hacer frente a un bolo delante de un festival. Mejor en sala.
Saludos.
Rich es un gran musico , pero siempre fue un soso, mismo con la banda madre es un sosainas sobre el escenario!Mira que curuioso haberte encontrado con dos del pueplo vecino mio,los de Fuengirola en el Azkena!!!
ResponderEliminarun abrazo
El concierto de Rich Robinson, musicalmente estuvo bien, emocionalmente fué flojo, el último disco que ha sacado es muy correcto. Ozzy, no aporta nada, lo mejor los temas de Black Sabbaht con el bajista original.Black Label Society, como no me gusta, pues nada, de lo mejor del dia Danko Jones, se hizo muy corto.
ResponderEliminarAlberto
Siempre he dicho que Rich Robinson es un soso de tres pares, así que, aunque su disco me haya gustado mucho, no me extraña lo de su directo.
ResponderEliminarLo de Ozzy... me acabo de enterar que ha suspendido en Alemania. No sé que pasa pero el año pasado después de tocar en el Azkena también anuló. En fin.
Salud.
Rockland: El peor dia si, ya nos lo imaginabamos, el concierto de Bradley fue especial, muy emotivo ademas por el caracter del tipo, aquel de Mike Farris fue otra historia de esas que se cuenta durante generaciones... Imelda May estubo muy bien también hace creo que dos años.
ResponderEliminarRich soso, como a disgusto, y Mars Volta, yo no entiendo nada de lo que pretenden pero tienen seguidores a manta, el sábado fue otra cosa.
Un abrazo master.
TSI:Si,Tsi, si que es soso ya sabía, pero chico, es que por momentos no parecía ni siquiera estar agusto tocando, no se, me gustaría verlo en sala porque el tío tiene mucha clase.
Realmente era uno de Fuengirola, tiene un bar, y venía con una pareja amigos suyos y clientes que son ingleses, se llama Ruben y era majísimo la verdad.
Abrazos.
Anonimo: Hola y bienvenido, estoy de acuerdo con todo lo que apuntas, mira estuvimos viendo un rato a Black Lavel Society, y no me disgustan pero me mato el Zakk Wylde con un punteo incomprensiblemente largo y tedioso, olvidé mencionarlo en el post. No llegue a Danko Jones.
Saludos.
Paulamule: Soso, pero mas que con Black Crowes aún, y es una pena porque tiene clase y talento.
¿A anulado Ozzy en Alemania?, pues menos mal que se le vió mejor que el año pasado, lo de los "friends" me parece una escusa para hacer la gira sin mas... En fin, ya paso.
Gracias por pasarte Paula.
Besos!
Un desastre de día, impropio de un Festival como éste.
ResponderEliminarSalvo a Pontius Snibb 3 y The Screaming Tribesmen, a los que habrá que seguir de cerca.
Menos mal que quedaba el sábado.
Saludos
Arthur: No fue un buen día, y encima la liada de la comida... Bueno estuvo el tema Virgen blanca, la putada es que tu te lo perdiste.
ResponderEliminarEstos grupos si estuvieron bien si.
Abrazos...