Entre las vacaciones y la falta de tiempo material para seguir descontando horas a Morfeo que dedicar a escuchar música, leer, ver cine, salir y escribir, me he encontrado con la enojosa pero irrefutable realidad de que hace dos semanas que no me encaro a la hoja en blanco de LCD que se extiende bajo el membrete de La Comunidad del #FFVinilo para destripar alguno de los discos que habitan en la estantería del cuarto que mas emociona a quien esto escribe... la de los vinilos.
De esta semana no podía pasar y quería que la elección fuese especial, así que me he puesto a la tarea de hacer pasear por entre mis dedos los vinilos en busca de que uno me inspirase, si bien es cierto que no suele Aaparecer ese chispazo de lucidez, y termino no teniendo ni idea que elegir, bien porque me apetece escribir sobre muchos o por todo lo contrario, pero debo decir que en esta ocasión la bombilla se ha encendido al paso ante mi nariz de este disco de los aragoneses Mas Birras: "Tierra Quemada".
La historia del arte esta superpoblada en sus trasteros de olvido y sus celdas de injusticia de artistas que no han sido justamente valorados, artistas malditos cuyo arte no ha sido entendido por sus contemporáneos o bien no ha interesado a los que hacen de la cultura una industria que se sirve de ella para cumplir el objetivo de toda industria, ganar pasta caiga quien caiga, en el caso del arte es esta, y muchos artistas las víctimas de esta profusión de intereses comerciales disfrazados de desinteresada actividad de divulgacion cultural para enriquecer el mundo y colaborar a la felicidad individual y colectiva de sus clientes...quiero decir aficionados y almas sensibles a la belleza, esa con la que mercan.
Mauricio Aznar es un ejemplo fragante de esto que digo, cantante, compositor, escritor y guitarrista zaragozano que rubricó una brillante carrera en lo artístico pero invisible en lo popular y de exiguo reconocimiento.
Desde sus inicios en la formación rockabilly Golden Zippers, especializados en versionar a los legendarios pioneros del rock and roll y con una actividad principálmente en ingles, formando luego estos magníficos e históricos Mas Birras que miraban al country y al folk americano desde las áridas piedras de Los Monegros sin perder la esencia de su Aragón y dejándose querer por el southern rock y el americana, siempre insisto, llevados estos sones en la dirección que el cierzo mandaba, y centrando su actividad en los últimos años en la divulgación del folk argentino utilizando como vehículo para ello a su banda postrera Almagato, en estas estaba cuando la muerte le sorprendió en octubre de 2000, dejando triste al cierzo que se quedó sin poesía y sin el country en castellano que nacía teniendo a la tierra que el orea como inspiración y protagonista de sus quejidos y alegrías, y a nosotros, fieles de su arte, tristes y un poco mas vacíos, la mayoría incomprensiblemente ni se enteraron de la desgracia, y tras 14 años, no da la sensación de que su obra y su vida sean debidamente reivindicadas por nadie, desde aquí lo hago yo con toda la profusión de mi ser.
Tras cuatro intentos discográficos, notables en lo artístico aunque desgraciadamente mimetizados con la indiferencia, llega este quinto y último trabajo, el mejor firmado por el grupo, por maduro, por redondo sónicamente, perfecto trabajo de Toni Luz a los controles, impagables colaboraciones del poeta que después triunfaria con los Troglos de Loquillo: Gabriel Sopeña y decisiva la aportación a las guitarras del fenomenal Josu R. Garcia, entre todos crean una recopilación de la que asoman por los surcos del plástico countrys que saben a bourbon sin dar la espalda al tempranillo, que se centran en el suelo aragonés y en las mujeres que llevan el "ico" en la garganta en lugar de evocar al desierto de Texas y a las Peggy Sues de Alabama, "Loreto" o "El Hombre del Tambor" son dos ejemplos de esto.
Southern rock con latigazos de un blues febril que enfrenta su infernal procedencia al poderoso influjo de la Pilarica como se puede comprobar en cortes como "Quien ha Venido" o la cañera "Carne de Tren" y un rockabilly de inspiración entre yanky y catalana...entre Stray Cats y Rebeldes, siempre con sus personajes cercanos en la distancia, lejanos en la psiquis campesina y primitiva y universales en el corazón que siente con pasión los avatares del amor y la soledad, brebajes que calman la sed del artista tanto a uno como a otro lado del Atlantico, fantásticos temas que nos hacen vibrar como "El Blues del Hijo de Dios" y la clásica "Mas Madera".
Se completa el disco con medios tiempos de americana inspiración y hermosa poética en los textos escritos por Aznar y Sopeña que crean hermosas historias de tristezas de amor y vida en canciones como "Promesas Rotas", "Ya me Voy" y "Para Llegar a Ti".
Un autentica maravilla de la que casi todos los aficionados viven ajenos y que es una hecatombe cultural, pues Mas Birras fue una banda mas que notable, su sonido country-folk, su inspiración americana y su vocación rockera antigua dieron origen a deliciosos temas que además llevaban a su tierra y la realidad de la misma escarificada en cada fibra de su tejido sónico, es para mi un placer reivindicar este gran disco y a esta extraordinaria banda del inolvidable Mauricio Aznar.
Buen fin de semana a todos!!!
uNO de ,os grupos mas infravalorados de este pais . si su discografia estuviera editada en USA estaría al lado de Whiskeytown, Uncle tupelo y similares. Muy grandes y ojala reediten la misma
ResponderEliminarEn el club de amigos del disco aragones reedito el mini-Lp "Al Este del Moncayo" y tenía intención de reeditar algunos mas, creo que de momento se ha quedado ahi la cosa pero lo puedes conseguir en este enlace en vinilo y reeditado:
Eliminarhttp://linacero.com/tienda/index.php?id_product=14&controller=product
Por supuesto suscribo tus palabras una por una amigo.
Saludos.