...hay nostalgia, crepúsculo, el traqueteo de los trenes atravesando la pradera, desamor macerado en alcohol y regresos sin esperanza. |
En los inicios del presente siglo, la formación de los Black Crowes sufre diversos cambios en los roles de bajo y guitarra, especialmente determinantes en el de las seis cuerdas.
Sale Marc Ford, quien mantuvo con más que evidente solvencia el dominio de la parte de guitarra líder, y la búsqueda de un referente de garantías no parecía tarea fácil.
Primero fue Paul Stacey quien acompañó al menor de los Robinson en la dupla guitarrera, pero desde el principio quedó claro que esta situación era temporal por propio deseo de Stacey.
Y fue el propio Stacey quien se ocupó de la producción de "Warpaint" en 2008, una vez resuelto el problema del guitarrista con, nada menos que Luther Dickinson, que así combinaba este status con el suyo seminal de capitán de su propia banda, North Mississippi All Stars.
El fichaje era de enjundia y resolvía el problema sobradamente, el hijo del mítico Jim Dickinson dotó al sonido de los Crows de una esencia sureña que por supuesto el grupo ya tenía, pero que miraba al blues de manera mucho más incisiva que en el pasado.
Esto quedó claro en el mencionado "Warpaint", para reubicar su esencia como guitarrista en el siguiente intento discográfico de la formación de Atlanta, "Before the frost... until the freeze".
Siempre pensé, y sigo pensando, que ambos trabajos han sido injustamente tratados por crítica y público. No esconderé que a un servidor le parecen de lo mejor de la producción de los cuervos a muy poca distancia de su célebre triplete inicial, y claramente por encima de otros trabajos del grupo como "Lions" (2001), "By your side" (1999) o "Three snakes and one charm" (1996).
Estos días he recuperado el segundo de los discos que contaron con el concurso de Dickinson, es decir "Before the frost... until the freeze".
Vuelve a encargarse de la producción Paul Stacey y para este cancionero deciden entrar en The Barn, el estudio de Levon Helm en Woodstcok, y allí grabar el disco con la asistencia de público y en directo riguroso.
Aquí insisten en los sonidos propios y enraizados en la tradición musical americana, en especial el rock y el blues, más la adición de discretas pinceladas de country o folk. Entroncan estas nuevas composiciones con sus ya conocidos referentes inspiracionales: los Rolling Stones de finales de los sesenta y principios de los setenta de manera predominante, pero también The Faces, CCR, Free, Traffic o The Band son influencias evidentes en la música de The Black Crowes.
Disco doble, que apareció en su día con una primera parte en formato físico, "Before the frost", quedando el supuesto segundo disco "Until the freeze" en formato virtual, al que se podía acceder por medio de una tarjeta con un código para su descarga, así lo tengo yo, aunque posteriormente han aparecido otras ediciones con los dos CDs o incluso un formato en vinilo con todas las canciones, pero ordenadas de manera diferente, nunca he entendido este experimento.
Pero tras tanta cháchara, al final en un disco mandan las canciones, de nada sirven nombres propios célebres, estudios de relumbrón, grandes producciones o referentes estilísticos de evidente exquisitez, si las canciones no funcionan, no funciona el disco.
Y eso es lo que hace de este trabajo uno de mis favoritos de la banda, que está rebosante de grandes temas, de auténticos temazos, que suenan como un trueno furioso en medio de la madrugada o que ronronean como gatos encelados en un callejón solitario.
Por citar alguna de mis coplas favoritas citaré la explosiva "Good morning captain"; la soberbia "Been in a long time (waiting on love)", con precedentes que nos llevan a la Creedence; la hermosa y nostálgica "Apaloossa" o el extraordinario boogie de rugientes guitarras "A train still makes lonely sound"...
En definitiva, magnífico repaso al rock sureño donde no falta ingrediente alguno: hay nostalgia, crepúsculo, el traquetreo de los trenes atravesando la pradera, desamor macerado en alcohol y desesperanzados regresos a casa.
Vuelvo a defender, hoy por escrito, los dos últimos discos de The Black Crowes como dos de los mejores catálogos de rock americano que se han registrado en el presente (y decadente) siglo.
A mí me gusta mucho, por la variedad y la calidad de sus canciones, y lo defiendo como tú, pero por encima de "Lions" no lo pongo, pues es un disco que me parece sensacional.
ResponderEliminarAbrazos.
De la época que queda en medio de las etapas del grupo si es verdad que "Lions" es el mejor con diferencia y que también debería entrar en el grupo de elegidos, a pesar de lo horrible de la portada.
EliminarAbrazos.
Buenas, a mi tanto Warpaint como Before the frost me parecen muy buenos. Un nivel excelso con Luther en plan estelar. No veo ninguna fisura a ambos. Es más el paso de Luther se cerró con otra joya Croweology. No los pondría por encima de Lions pero tampoco por debajo ja ja. A un nivel similar
ResponderEliminarSex, love and rock´n soul
Coincido, realmente "Lions" es otro disco que perfectamente puede estar a esta altura, tal vez yo empaste más con este, pero "Lions" me parece también estupendo.
EliminarSalud!
A mi Warpaint y Before the Frost me parecen muy distintos .... Warpaint si recoge la vuelta de tuerca blues en muchos temas. Muy duros en algunos, lo que les valió alguna crítica. Before the Frost esta hecho mirando a The Band a Grateful Dead a ... otro tipo de clasico. Es como si fuese de otra banda. Ambos me encantan porque ambos mantienen la personalidad de lo crowes intacta ...
ResponderEliminarClaro, por eso comento lo de que Dickinson se tiene que reinventar a la hora de grabar Before the frost. Creo que en principio Warpaint va mucho más con la línea de Dickinson, aunque a mi, contra todo pronóstico por mis gustos personales, me gusta más Before the frost. En cualquier caso me parecen excelentes discos ambos.
EliminarSalud.