...la labor de arqueología musical que opera Rachel y sus secuaces para completar los tracklist de sus discos desemboca en beneficio de todos...
Por Jorge García.
A principios de esta semana la organización del Azkena Rock Festival daba a conocer los primeros nombres que enriquecerán el cartel que mostrará sus virtudes ante el personal en las campas de Mendizabala el próximo mes de junio.
A título personal me parece una propuesta mediocre y decepcionante, si bien es cierto que en la tanda se encuentra alguna luz entre no pocas sombras.
Una luz ensombrecida por la inesperada tragedia que terminó con la vida de Rachel Nagy en enero de 2022 se vislumbra en el cartel al descubrir el nombre de la banda que la rubia cantante de Michigan capitaneó durante más de dos décadas, me refiero desde luego a The Detroit Cobras.
Si Rachel siguiese entre nosotros hablaríamos de un momento prometedor y a buen seguro impactante y memorable para la edición del ARF/2024. Pero la tozuda realidad es que Rachel no está, aunque desde hace algunas fechas la banda se ha rearmado con la presencia ante el micro de Marcus Durant, frontman de los también estupendos Zen Guerrilla, presumiblemente, este será quien ponga la voz a las canciones del grupo el próximo mes de junio en Gasteiz.
Desde luego este redactor no faltará a la cita y ojalá se fundan en un mismo acto un sentido homenaje a Rachel y un estupendo bolo, casi como los que la banda de Detroit protagonizaba con ella al frente.
Aunque de momento ya hemos conseguido un bonito beneficio de la presencia de The Detroit Cobras en el cartel del próximo ARF, retomar sus discos, su música, sus impactantes y fascinantes versiones de clásicos y no tan clásicos temas del soul y el Rhythm & Blues de los viejos tiempos, cuando el rock, el soul, el blues o el garage verdaderamente volaban cabezas y dislocaban caderas.
En 1998 se ponía en circulación el primer disco de The Detroit Cobras titulado "Mink, Rat or Rabbit", repleto de versiones correspondientes a los géneros mentados, pero pasados por el tamiz sónico del grupo, más cercano al garage y al rock de esencia primitiva que a las suavidades y acariciadoras texturas propias de alguna de las tomas originales.
Como ocurre con The Cramps, la labor de arqueología musical que opera Rachel y sus secuaces para completar los tracklist de sus discos desemboca en beneficio de todos, en lo referente a este escriba, diré que no han sido pocas las tonadas souleras o Rhythm & Blueseras que he descubierto gracias a esta agrupación.
Su primer elepé es una declaración de intenciones llena de excitantes versiones, algunas sobre conocidísimos originales como el corte que cierra el disco, la célebre "Breakaway" (Jackie DeShannon-Sharon Sheeley) que revisitan desde la toma de 1964 por Irma Thomas, que es una artista repetidamente versionada por los de Michigan.
Las guitarras rugosas y ásperas junto a la percusión cacharreante y la afilada interpretación de la Nagy marcan la diferencia con respecto a los estilos primitivos de cada tema, sin dejar que se diluyan las características básicas de los mismos pero poniendo en primer plano el temperamento de la banda, cuyo sentido musical y estilístico orbita alrededor de ese Sol que era Rachel Nagy.
Bajo estas premisas se desarrolla una colección de canciones extirpadas de las vísceras de la historia musical de los cuarenta años precedentes a la aparición de The Detroit Cobras. En este debut nos podemos encontrar con joyas como "Cha-Cha-Twist" rescatada del catálogo de un no demasiado recordado Brice Coefield; "Can't Do Without you" de un igualmente semi-olvidado Dusty Wilson o una especie de mambo selvático instrumental titulado "Chumba" de unos desconocidos (al menos para un servidor) Gabriel and The Angels.
Estos temas supusieron un descubrimiento para el que suscribe, y forman parte de un álbum en el que estas coplas se enlazan con partes del histórico cancionero de referencias mucho más presentes en la memoria auditiva de la música del siglo XX, que también pasan por el filtro sónico de The Detroit Cobras y cuyas revisiones no pueden pasar desapercibidas, en este sentido podemos escuchar covers tan convincentes como "I'll Keep Holding On" de The Marvelettes; "Putty (In Your Hands)" de The Shirelles o "Easier to Cry" de The Sangri-Las.
También giran con versatilidad hacia décadas coincidentes con la propia del nacimiento del grupo, repasando estilos como el garage-punk de Oblivians por medio de su tema de 1996 "Mad Man", que la banda rebautiza en su cover como "Bad Girl".
El country también pasa por la trituradora de The Detroit Cobras en la adaptación de "Midnite Blues", obra del músico de Arkansas Charlie Rich, así como el Rhythm & Blues más rockero y pionero en la excitante "Out of this world" perteneciente al cancionero de otro semi-olvidado como el también oriundo de Detroit Gino Washington.
Siempre es un placer recuperar discos como este debut (y los siguientes también) de The Detroit Cobras, cuya carrera y excitantes actuaciones en vivo se vieron trágicamente truncadas hace casi tres años por la desaparición de la indómita cantante de la larga melena rubia. La incursión de esta banda en el cartel del ARF ha supuesto un feliz retorno de esta querida banda a mi equipo y una oportunidad única para reivindicar desde aquí a la gran Rachel Nagy.
Me sumo a tan merecidísimo homenaje a una banda como Detroit Cobras y a su front-girl, la inigualable Rachel Nagy. Este "Mink, Rat Or Rabbit" que presentas hoy es una auténtica gozada del mejor garaje soulero intemporal. Recuerdo la triste noticia de la desaparición de Rachel porque estaba anunciado un concierto suyo en Madrid meses antes y se suspendió a causa de su muerte. También celebro la recuperación de la banda y que aparezca de nuevo sobre los escenarios. No me los perderé si caen por aquí (antes que se rompa España, claro...)
ResponderEliminarFuerte abrazo,
Fue un palo, yo creo que nadie lo esperaba aunque nunca se dijeron las causas de la muerte. Ignoro si hay más conciertos programados a parte del del ARF, pero llevan girando y tocando en vivo varios meses. Me imagino que caerá gira española.
EliminarSi se rompe España a ver si nos toca en el mismo trozo.
Abrazos.