…califican su sonido como: Chicle con sabor ácido que en la mayoría de los casos resulta inofensivo…
Por Jorge García.
El terceto que hoy traigo a Rock and More tiene su base de operaciones en la ciudad australiana de Sydney, califican su sonido como: Chicle con sabor ácido que en la mayoría de los casos resulta inofensivo, afirmación que completan con otra reiteración tan desacomplejada como la siguiente: Solo estamos interesados en que lo pases bien…
Los autores de tamañas grandiosidades se hacen llamar Sick Fizz y, si bien su primera aseveración me deja un tanto perplejo, no me cabe duda, tras escuchar su último complejo vitamínico titulado "The Future is in The Pits", que la segunda es cierta al 100%.
Partiendo de tan categórica enunciación, marcada como irrefutable declaración de intenciones por parte de los interfectos, podemos decir que se evidencia en cada una de las doce canciones que contiene el álbum, que el jaleo, el jolgorio y el alboroto son algunos de los elementos sin los cuales sería complicado cuadrar un disco como "The Future is in The Pits".
A esta actitud o, si lo prefieren, comportamiento, es necesario sumar un conglomerado no administrado de manera demasiado ordenada – pero sorprendentemente, coherente – de estilos como el Punk, el Garage-Rock, un pegajoso Pop melódico, el Rock and roll de pura cepa, el Proto-Punk o incluso el Glam-Rock.
Emplean algo más de media hora en despachar una docena de temas y hacen derroche de un desenfreno que deja en evidencia que el trío pone toda la carne en el asador en cuanto a intensidad, energía, cachondeo, frenesí y locura en general.
Se pueden escuchar Fuzz, guitarras acústicas, teclas diabólicas, distorsiones a go-go, bases rítmicas vertiginosas y vocingleros estribillos entonados sin prestar demasiada atención a las normas más básicas de la afinación, todo con una actitud desinhibida y divertida.
Incluye además una portada bastante alucinante, que inevitablemente evocará a un film noventero, hoy de culto, dirigido por Tim Burton y titulado "Mars Attacks!" que muchos lectores seguro que recuerdan.
En el disco se puede escuchar de todo, agitado y batido, de las dos maneras, aunque siempre con las coordenadas mencionadas como soporte anímico, sónico y estilístico de todas y cada una de las canciones, destacando para este escriba algún título especialmente impactante como el Punk-Garaje "Clusterfuck"; el Power-Pop desbaratado "Ready to Go"; el demoledor Garage-Punk "Hip Babe"; el ruidoso Pop Sci-Fi "Rally the Groovers" o el Boogie atronador "Up in My Grill". Si bien vamos a quedarnos con el exaltado single "Hanging Defence" del que visionaremos su videoclip.
La banda australiana Sick Fizz juegan a hacer música para divertirse, sin complejos y con personalidad, sin atarse a ortodoxias y mucho menos preocupándose por el qué dirán. Juegan con energía, desparpajo y sobrados de ganas, y al menos un servidor, necesita - de vez en cuando - grupos y discos así.
Reseña publicada el pasado 26 de junio de 2024 en Exile SH Magazine.
Comentarios
Publicar un comentario